Acrílico de Allan McDonald
Poema de tumorAllan McDonald
Los que ampliaron el cinismo en asesorías
(y fueron calificados como "good boy" y no como "Killer boy"),
los que separaron la flor del verso
en las bases de revolución,
los que se pudrieron en las aulas de Oxford,
México, Colombia, Washington,
por asesinos, por criminales, por culpables,
por cobardes,
los siempre radicales de todo
("me permito remitirle al genocida
por diestro impune
y con el agravante de ser guerrilleros de su propia conciencia"),
los que llenaron los gobiernos y burdeles
de todos las burocracias de la zona
("el calzoncito rojo", "la estrellita", "Happyman"),
los sembradores de odio en plena selva globalizadora,
los reyes de la pagina social,
los que nunca sabe nadie donde se esconden,
los mejores prestidigitadores del mundo,
los que fueron cosidos a dólares al mercadear la paz,
los que no murieron de vergüenza
o de las picadas del escorpión de la conciencia en el infierno de las verdades,
los que se restregaron la letra del himno nacional ,
bajo el papel higiénico del vendepatria acolchonado del norte,
los arrimados a la historia, los mendigos del poder, los marihuaneros de la razón,
“compañeros” hijos de la gran puta,
los que apenitas pudieron identificar mi hálito de vida,
los que tuvieron un poco mas de pudor,
los eternos cómplices,
los callatodo, los vendetodo, los tragalotodo,
los primeros en sacar la credencial burocrática,
los asesinos más felices del mundo,
Mis “ex compañeros”,
mis “hermanos”.
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