miércoles, 26 de mayo de 2010
Imagen Pública
El colmo de los colmos, no aceptamos que las empresas, direcciones, instituciones y ministerios del Estado, patrimonio de todo el pueblo hondureño, ingenuamente se preste para hacerle eco a las campañas comerciales de la empresa privada: “yo me la pongo el viernes”, la nueva campaña lanzada por una empresa del Sistema Financiero Nacional y que al “iluminado” Viceministro del Deporte se le “ocurrió” supuestamente, la “brillante idea” de que los empleados públicos utilicen la camiseta de la selección nacional todos los viernes, con el pretexto de la copa mundial.
No hay que engañarse, esta son directrices del mismo banco que sacando provecho de su tráfico de influencias y de los lacayos de turno que hasta sin necesidad de soborno hacen de todo para servir a sus patronos.
Es inaceptable, que estos agentes de la empresa privada, enquistados en las instituciones públicas, continúen carcomiendo al Estado desde sus mismas entrañas, no es aventurado creer, que estos personajes públicamente oscuros de la vida nacional, pro empresa privada, golpistas y oligarca de este país, terminen por entregar, por unos cuantos pesos, hasta la misma imagen de la virgen de Suyapa, poniéndole la camiseta de la selección, abriendo una cuenta de ahorro en este banco y cambiando sus puntos oro por un viaje a Miami, todo por el uso de su tarjeta Platinium Visa, ¡ya basta!
la imagen de las instituciones del estado son públicas y pertenecen exclusivamente a la población hondureña, me pregunto ¿qué beneficio obtienen las instituciones del estado al estar promoviendo el uso de la camiseta de la selección nacional?, ¿acaso esta empresa para solucionar la crisis del estado, aporta algo de sus ganancias multimillonarias? ¿Porque mejor, no se inculca al empleado público la responsabilidad por su trabajo? “yo me pongo todos los días la camisa del SANAA”, “yo me pongo a trabajar todos los días por la ENEE o por Hondutel”;
¡No! porque no interesa, porque lo que interesa es alienar al empleado público, para que no quiera a su empresa, la desprecie y lo único que quiera de esta es su dinero, para poder gastarlo y endeudarse por todos los medios posibles para comprar los productos de la empresa privada, hay que alienarlo, para que no se entere que grotescamente ahora puede ser usado como spot publicitario de lo privado en lo público, lo más lamentable, es que muchos de nuestros compañeros y compañeras de todas estas instituciones del estado, ni se enteren que están siendo utilizados como mercancía para vender camisetas, es probable que incluso ellos y ellas por ignorancia o temor a oponerse terminen de aceptar este tipo de medidas denigrantes, que es lo único que hemos recibido históricamente de estos traidores de las instituciones públicas y en definitiva traidores a la patria que los vio nacer.
Vladimir Rodríguez
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