jueves, 27 de mayo de 2021

Episodio 45, Un análisis sobre HCH, medio de comunicación en Honduras

 


Los traumas sociopolíticos afectan directamente al lenguaje, la forma común con que un estado o ciudadanía se comunica. Tomando al medio HCH como referencia dentro de Honduras, decidimos, con un grupo de amigos, darle análisis a este fenómeno cultural en Honduras y Latinoamérica dentro de los márgenes que nos permite la oclocracia.

https://drive.google.com/file/d/1kcLqrdmg77xu8XtnSN2LBpRAhuuah5N6/view?usp=sharing

sábado, 22 de mayo de 2021

Poema de un best boy - Fabricio Estrada

 

Poema de un best boy

 

Olías a repostería a la entrada de un cine

y juro que jamás he ocupado

de entenderte con subtítulos.

Llegaste ingrávida

hablando el idioma de un zeppelin en llamas.

 

Yo solo tuve que amar tus historias

de finales felices.

 

Lo demás

hubiera sido repetir

la misma cinta que nadie entiende

más que nosotros

entre las sombras.


F.E.

 

viernes, 21 de mayo de 2021

Solo el crepitar de los labios, Fabricio Estrada

 


Solo el crepitar de los labios

 

Hemos estado hablando de la muerte

como si de una vendedora ambulante se tratara.

Un día la saludamos y ella responde algo sobre el clima.

Entre la prisa de la lluvia y los lentos días abrasadores

conocemos su nombre

y hasta de una hija paralítica

le aceptamos un cigarro que nunca fumamos

y lo dejamos olvidado sobre la mesita junto a la cama.

 

Las esquinas siguientes son días vacíos.

 

Y no sabemos adónde se fue.

 

Nos cuentan que fue desalojada

que una nube de gases se plantó en su lugar

como una ceiba de espinas muy largas.

Decomisaron su mercadería, la quemaron en un solar baldío.

 

Regreso a casa sin saludo

aunque tenga un cigarro que ahora enciendo

con la cautela de un fantasma chino de papel.

 

Cerca de mis ojos veo el ondular de su rostro

 

y las palabras se me queman despacio.

 

 F.E.

Episodio 44, Me llamo Rojo, Orham Pamuk


 En este episodio nos acercamos al centro de la ceguera mística, dejamos que Pamuk nos lo diga en un fragmento de su monumental novela, Me llamo Rojo. Abramos los ojos, entonces, y démonos la oportunidad del esplendor.

https://drive.google.com/file/d/1-FmvW34pEGnEJvtqQkiZ3FqN7klxKdRE/view?usp=sharing

jueves, 13 de mayo de 2021

Episodio 43, Sabanagrande en mis ojos cuadrados

 


A través de la mirada fotográfica, la emulsión de aquello que fue Sabanagrande en mi infancia. Cada memoria es un ángulo y también composición, con la música que le dio sustancia a los viejos equipos de sonido que ahora solo suenan si cerramos los ojos y respiramos profundo.

https://drive.google.com/file/d/14yLVH32jSLvz9NC7ym9vvhcORG-UjDNI/view?usp=sharing

martes, 11 de mayo de 2021

Harry El Sucio ¡un dedo arriba!

Con Iris hemos estado sopesando dejar de ver series durante un buen tiempo. La última que nos tuvo sujetos fue Glitch (más muertos vivientes, pero softs y desconcertados por volver a la vida). No valió la pena y no vale la pena -sentenciamos- que estemos esperando que el próximo episodio mejore lo que ya se ve insalvable. Y ese es el gacho: quizá mejore... y uno se ve sentado hasta el final con unas 18 horas perdidas que bien pudieron decepcionarnos en dos horas de haber sido película. Con robustas excepciones como Raised by Wolves, The End of The Fucking World, El Perfume, Dark, Marco Polo, Breaking Bad y algunas otras, todo lo demás es un refrito de situaciones escandalosamente vacías dirigidas a adolescentes.

Hay días en que uno se despierta con dolor en la espalda o el cuello. Hoy desperté con dolor en mi área hipotalámica del gusto por el cine. Necesitaba un trago de buen café doble y sin azúcar del mejor cine que me devolviera la fe y me decidí por Harry El Sucio. ¡Y carajo que sí acerté!

En dos poderosas horas  el thriller que marcó a laspelículas de acción de los ochentas y noventas, y cada escena era la antesala de algo mejor (¡Harry subido al puente esperando saltar sobre el bus escolar!). Don Siegel pone a un consumado vaquero del imaginario western a ser una especie de Sheriff hastiado en las calles de San Francisco. Su antagonista es un Joker al que seguramente puso el ojo Heth Ledger para crear su propio personaje perturbador, y con seguridad James Cameron le guiñó el ojo a Arnold Schwarzenegger y le dijo: ¿por qué no te imaginás a Clint Eastwood como un exterminador? Y es que Harry hace todo el periplo de lucha en la película hasta llegar a la fábrica del fin y de paso rememorar sus grandes frases en El Bueno, el Malo y el Feo con un juego de palabras sarcásticas donde la ruleta rusa solo puede darse en la desesperación del villano.

Esta película, filmada en 1971 con las gloriosas imperfecciones de Panavisión y los seguimientos de cámara en bruto (es decir, sin steady ni dollys), señala con crudeza la instrumentación del guetto negro por parte de los blancos: son como activadores de la furia necesaria, como reservas donde animalizarse. Los mejores ejemplos son dos escenas: la del asalto al banco y la del anticipo del Fight Club que pide con insultos racistas el perverso asesino en serie, interpretado por el genial Andy Robinson.
Sabemos de que está hecho el show en la cultura estadounidense, pero Don Siegel logra la metáfora perfecta en la impresionante escena del estadio de fútbol donde Harry Callahan tortura al asesino: todas las luces sobre él en el gran escenario de las masas, el Pollice verso de Jean Leon-Gerome mostrándonos la sustancia pura de lo que ansía ver de nuevo la sociedad capitalista: gladiadores.





Me dedicaré un buen rato a ver de nuevo a los pesos pesados de los 60 y 70. 


viernes, 7 de mayo de 2021

Episodio 42, El barrio Morazán que viví

 

He vuelto al Barrio Morazán, esta vez con la reconstrucción de la memoria a través de la oralidad que permite mi podcast, con la construcción de temporabilidad que permite la técnica de llenar con sonidos aquello que aparece oníricamente y que jamás imaginamos que vuelva. Un testimonio de mi infancia en el barrio más populoso y antiguo de Tegucigalpa.

https://drive.google.com/file/d/1jeAABN3dwt314xYLPSD9vh4F-1xqzCfj/view?usp=sharing