Lo que antes del 28 de junio era una infinita parodia de celebración con los colegios desfilando hasta el cansancio, ahora se combina con esas mismas marchas en decadencia transmitidas por las redes del oficialismo y con estas movilizaciones en Resistencia de pura celebración, donde se plantean serias y objetivas (gravísimas para la oligarquía local) aspiraciones independentistas. Y claro que se está dando una independencia desde esta elección de conceptos, ya que en gran parte de las últimas decisiones del gobierno espurio del Lobo Pepe también se están realizando pasos decisivos para independizarse de su base social (para que no estorbe) y elevarse así a un estadio donde el Estado sólo existe en las aspiraciones netamente transnacionales, prueba de ello es el impulso de las Ciudades Modelo y su elemental vaciamiento de la soberanía y de la ciudadanía conocida "cívicamente" hasta hoy por la precaria hondureñidad.
Toda acusación del golpismo hacia la Resistencia en cuanto a que se ha politizado el "fervor patrio" será respondida por la Resistencia con la avalancha de su estructura partidaria, una conquista que llevará todo un proceso de depuración (ojalá no como burocratización o réplica del bipartidismo) y donde cada fecha instaurada por el oficialismo tradicional será invertido, decodificado y amurallado con un inédito sentido común revolucionario que suplantará, progresivamente, al sentido común de corte eclesiástico y cívico.
F.E.
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