Cuando escuché las burlas e improperios que gritaba la barra de muchachos y adultos a Salvador Zúniga (aparecieron como delegados muchachos entre 15 y 17 años de organizaciones inéditas y adultos multiplicados del Movimiento 28 de junio y otras corrientes liberales) supe que el golpismo había logrado meter su mejor virus a la asamblea, que su gran estrategia sustentada en el reduccionismo de lucha y el determinismo histórico del impulso cívico-electoral había alcanzado su efecto demoledor de argumentos.
Esos improperios dirigidos a todo aquel o aquella que
contravenía lo que la compañera Gloria Oquelí había urgido a detener de entrada
(la no dilatación del tema del Frente Amplio), levantó el discurso que pronto
se resumió en el grito generalizado "no queremos paja, queremos
elecciones".
Se puede ensalzar hasta el cansancio lo que el pueblo en
sus deseos construya, eso es innegable y necio debatirlo, sin embargo, callar
lo que la vanguardia del Frente ahora instrumenta sin ética alguna (y eso va
desde el bajar el volumen de los micrófonos cuando un refundacionista hablaba o
alentar el insulto desde la mesa principal levantando los brazos y juntando las
manos en dirección de la nueva mancha brava) es algo que no se puede dejar de
señalar sin necesidad de caer en la disidencia automática.
"Todo el poder al movimiento social" cerró el
compañero Manuel Zelaya en franco recordatorio del "todo el poder a los
soviets", y sin embargo, Salvador Zúniga representaba a uno de los soviets
auténticos que se construye desde el movimiento social, a un compañero que
junto a miles de lencas redefinió el sentido del movimiento social en Honduras,
muchos años antes que las asambleas del poder ciudadano aparecieran en el
Gobierno de Mel, y aún así, nadie de la mesa principal tomó el micrófono para
exigir respeto a uno de los baluartes representativos de lo que dio forma al
FNRP, a excepción de los tibios llamados que la compañera Vanessa Maradiaga
dirigió a los asamblearios para pedir que dejaran hablar a todos.
No había necesidad de mostrarse tan brutales (esa será
una factura que se les pasará puntualmente y de manera natural a los que ahora
apoyan este mecanismo vernáculo), ni habrá necesidad de esto en el futuro
cercano del Frente Amplio. Cientos de golpistas convertidos en líderes del
Frente Amplio por oportunismo, se cobijarán bajo ese canibalismo y los valiosos
cuadros formados en dos años de lucha irán diluyéndose en medio de la más
rabiosa fiebre electoral una vez que se alce la lucidez en lugar del jingle
electoral. Por ahora, queda demostrar cuán firmes son nuestras convicciones
revolucionarias y cuánto podemos definir en la compañeros y compañeras que hoy
por hoy son estimuladas y estimulados con el más reaccionario y básico deseo de
poder.
Compañero Salvador Zúniga, compañera maestra de Lempira
(también abucheada) gracias por hablarnos con tanta dignidad.
Homenaje a los asesinados por el golpismo, previo al desarrollo de la agenda. Comité de Familiares y Desaparecidos de Honduras, COFADEH.
TV Globo: Transmitieron César, Félix y Rony
Patricia Rodas
No hay comentarios:
Publicar un comentario