En Honduras, los F-5E y F-5F (caza de tercera generación adquiridos en número de doce en 1988), acostumbran a pasar -tenebrosos- cada crisis política o golpe de Estado. Se les mira, cada 15 de septiembre, hacer tirabuzones y pases rasantes sobre la sufrida capital y, desde el estadio lleno, se les aplaude con entendible asombro por esas máquinas que Leonardo da Vinci tuvo que haber soñado.
Aquí están las fotografías que logré sacarles.
Para saber más sobre los F-16 Falcon y los F5E hondureños, entre aquí:
1 comentario:
Los vi hace un rato en San Juan, me encanta el espectáculo. A mi ese tipo de avión y el ruído me evoca recuerdos que no tengo pero que se que muchas, tal vez demasiadas personas,tienen.
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